Inundaciones obstruyeron tránsito por las tres autopistas principales

SANTO DOMINGO./Por RAMÓN URBÁEZ/ADRIANA PEGUERO - El tránsito por las tres principales autopistas del país se encontraba obstruido anoche por las inundaciones y el desbordamiento de ríos, provocados por las lluvias que dejó a su paso por el océano Atlántico el huracán “Ike”, a unos 155 kilómetros de las costas del Norte de la República Dominicana.En el Norte, la autopista Duarte fue interrumpida por el río Guananico, que se salió de su cauce en el kilómetro 57, entre Villa Altagracia y Piedra Blanca, en Bonao.El mismo río, afluente del Haina, inundó tres sectores de Villa Altagracia, donde fueron evacuadas de emergencia unas 50 familias.En el Sur, las crecidas del río Ocoa destruyeron los aproches del puente de Boquerón, en el límite de las provincias de Azua y Peravia, interrumpiendo el tránsito por la carretera Sánchez de manera indefinida, y anegando varias comunidades del Palmar de Ocoa.El tránsito está cortado en Galeón por la crecida del arroyo Pinzón que destruyó parte del puente, por lo que los vehículos que van al Sur se desvían en Baní por Sombrero y luego toman la carretera de Las Tablas, para salir a Galeón.Decenas de automóviles y camiones cargados de productos agrícolas de Barahona y San Juan de la Maguana no pudieron llegar a los mercados de la capital.En el caso de la autopista Las Américas, en la zona Este, las aguas se acumularon a los largo de 500 metros a la altura del kilómetro 16, ocasionando un taponamiento de vehículos que duró varias horas.En la autopista varios vehículos se quedaron varados, tras ser sorprendidos sus conductores por las aguas desbordadas del río Guananico, cuyas corrientes anegaron ambas vías de la carretera.Un autobús de Transporte Espinal sufrió desperfectos y los pasajeros fueron rescatados por miembros de la Defensa Civil y la Policía.Marcos Medina, de la Defensa Civil del Puerto, de Villa Altagracia, dijo que era la segunda vez que el tramo del kilómetro 57 de la autopista Duarte era inundado por las corrientes del río Guananico, que pasa en una curvadura muy carca de la vía. La primera vez fue en diciembre pasado, tras el paso de la tormenta Noel.